Si una lámpara mágica tuviera
y me diera un príncipe azul
no podría desear jamás
a un hombre mejor que tú. Y si tuviera un deseo sería
obtener de ti un poco más
toda mi vida buscando felicidad
una y otra vez. Cuando menos lo esperaba
sorprendida yo descubrí
que la magia que yo buscaba
estaba toda frente a mí. Si una lámpara mágica tuviera
y me diera un príncipe azul
no podría desear jamás
a un hombre mejor que tú. Es la luz que brilla en tus ojos
la razón de todo mi ser
la llama que enciende mi fuego
la ilusión todo mi placer. Nuestra historia es como un libro
con las páginas sin abrir
pero pasan como un suspiro