Lo conoci de potrillo
galopando en la pradera
Y yo le puse el tordillo, tordillo
porque su pelo asi era de veras
y lo eduque de chiquillo
nada mas para las trincheras
Cuando ya vi que era hora
le compre su buena silla
Mi 30 30, canana y pistola
y mi tordillo decia, decia
ya se nos vino la bola
y nos vamos con pancho villa
Mi tordillo era entendido
y por nada lo cambiaba
cuando nos vimos perdidos, perdidos
por obregon en celaya, en celaya
nomas lanzo un relinchido
y nos fuimos para chihuahua
me demostro ser amigo
cerca de torreon coahuila
no obstante estar mal herido el tordillo
me llevo a la serrania enseguida
sacandome del peligro
pero dando por mi la vida
El tiempo ha transcurrido
del tordillo nada queda
A su nobleza suspiro, y suspiro
al recordar lo que fuera y quien era
ya parece que lo miro
galopando por la pradera